Astrónomos detectan la llamarada de agujero negro más potente jamás registrada

13

En un evento cósmico que ha asombrado a la comunidad científica, los astrónomos han observado la llamarada de energía más poderosa y de mayor alcance jamás registrada que emana de un agujero negro. Este espectacular estallido de luz, que inició su viaje de 10 mil millones de años a través del universo para llegar a la Tierra, brilló con la intensidad equivalente a 10 billones de soles.

¿Qué desencadenó el extraordinario estallido?

El evento, meticulosamente estudiado por un equipo dirigido por el astrofísico Matthew Graham del Caltech, se atribuye a un agujero negro supermasivo, estimado en 500 millones de veces la masa de nuestro Sol, que devora una estrella que se aventuró demasiado cerca. Estas comidas cósmicas, conocidas como eventos de perturbación de marea (TDE), ocurren cuando la danza gravitacional de una estrella la acerca peligrosamente a un agujero negro, destrozándolo. La inmensa gravedad del agujero negro crea fuerzas de marea extremas, que distorsionan y finalmente destrozan la estrella. El material resultante forma un disco giratorio que alimenta el agujero negro.

Un evento sin precedentes: J2245+3743

El agujero negro responsable de esta llamarada sin precedentes, denominado J2245+3743, experimentó un dramático aumento de brillo en 2018. En unos pocos meses, su luminosidad se multiplicó por 40, alcanzando un brillo 30 veces mayor que la siguiente llamarada AGN (núcleo galáctico activo) más poderosa observada hasta la fecha, un evento apodado en broma “Barbie aterradora”. Si bien se ha ido desvaneciendo gradualmente desde su pico, J2245+3743 sigue siendo significativamente más brillante que su estado original.

Cuando los investigadores publicaron sus hallazgos en marzo de 2025, la energía liberada equivalía a aproximadamente 1054 ergios, una cantidad asombrosa equivalente a convertir toda la masa del Sol en radiación electromagnética.

Diferenciarse de otros fenómenos cósmicos

Mientras que otros eventos celestes pueden desencadenar llamaradas de desvanecimiento lento, las características de J2245+3743 apuntan claramente a un TDE. Estos incluyen:
BOAT (Más brillante de todos los tiempos): Acompaña el nacimiento de una supernova y un agujero negro.
Kilonova: Producida por colisiones de estrellas de neutrones.
AGN: Parpadeo debido a cambios en el flujo de material hacia el agujero negro.

Al analizar la luz cambiante de J2245+3743, Graham y su equipo confirmaron que su perfil se correspondía mejor con un TDE, lo que sugiere que una estrella de aproximadamente 30 veces la masa de nuestro Sol fue destrozada.

El papel del disco de acreción

El tamaño de la estrella que se consumió también es intrigante. El astrónomo K. E. Saavik Ford de la City University de Nueva York sugiere que las estrellas dentro del disco de acreción de un AGN (el anillo de material que gira alrededor del agujero negro) pueden crecer acumulando materia del propio disco. Este fenómeno puede explicar la masa inusualmente grande de la estrella que fue víctima de J2245+3743.

Dilatación del tiempo: un efecto cósmico de cámara lenta

Lo que hace que este evento sea aún más sorprendente es el impacto de la dilatación cosmológica del tiempo. Debido a que la luz de J2245+3743 ha viajado una distancia tan grande a través de un universo en expansión, el evento se observa en cámara lenta desde nuestra perspectiva. A medida que el espacio se expande, la longitud de onda de la luz se estira y el tiempo mismo se ralentiza.

“Siete años aquí son dos años allá”, explica Graham. “Estamos viendo cómo se desarrolla el evento a un cuarto de velocidad”. Esta dilatación del tiempo es crucial para modelar con precisión la línea de tiempo de la llamarada y comprender cómo se desarrollan las TDE.

Importancia e investigación futura

Este extraordinario descubrimiento está preparado para remodelar la comprensión de los astrónomos sobre los TDE y los núcleos galácticos activos. La identificación de este evento único permitirá a los científicos reexaminar los datos existentes, revelando potencialmente otras erupciones que anteriormente se habían pasado por alto. Además, este hallazgo resalta la importancia de la dilatación del tiempo cosmológico en el estudio de fenómenos cósmicos distantes, que pueden producir descubrimientos aún más sorprendentes sobre el universo.

Este es un descubrimiento histórico que remodelará nuestra comprensión de las fuerzas más poderosas del cosmos. Al analizar cuidadosamente este tipo de eventos, podemos descubrir secretos sobre los agujeros negros y los procesos que dan forma a las galaxias a lo largo del tiempo.

Al estudiar J2245+3743 y eventos similares, los astrónomos pueden obtener conocimientos más profundos sobre el comportamiento de los agujeros negros y la evolución de las galaxias en todo el universo.